El sevillismo reedita una de sus noches mágicas para cumplir la estadística de jugar una final de Copa cada tres años. El 1-0 vale, pero los blancos se preparan para todo.
El sevillismo reedita una de sus noches mágicas para cumplir la estadística de jugar una final de Copa cada tres años. El 1-0 vale, pero los blancos se preparan para todo.