A pesar de ello, tanto el Espanyol como el jugador quieren resolver esta salida antes del 5 de julio, día en que los barceloneses arrancan su pretemporada, circunstancia que unida a las indecisión de Sevilla, Valencia y Atlético, quiere aprovechar el Mallorca, toda vez que deberían aumentar su oferta económica, pues el Espanyol quiere en torno a tres millones de euros por Márquez.