Las sinceras y evitables declaraciones de Papu Gómez sobre el rendimiento de los jugadores, en este mes previo a que comience el Mundial, han abierto un melón que todos esperaban pero nadie quería reconocer.
En este poco más de un mes, hasta que los jugadores se vayan concentrados con su selección, el Sevilla se juega la vida y tendrá que tener a todos sus jugadores en el mejor estado posible y con la concentración necesaria para afrontar los partidos.
El Papu tendrá la oportunidad de jugar su único Mundial, y está claro que no querrá perdérselo por nada del mundo, incluso hay quien tiene proyectado su nivel físico para llegar a tope a esta cita.
Pero eso tiene que ser compatible con ser profesional con el club que le paga, además en la situación que se encuentra el Sevilla actualmente.
Hoy vuelven los argentinos al entrenamiento, y será momento para mirarse a los ojos y comprometerse con con los compañeros y estar centrados en este mes importante de competición, como recordó ayer Iván Rakitic: «Ya me encargaré de que Papu y todos los demás tengan la cabeza en el Sevilla. Agradezco que sea sincero, pero todos debemos entender que lo más importante ahora es dar lo máximo».
