Los numerosos sevillistas que le conocen le recriminaron al comandante Alejandro Díaz que no volase con el equipo a Cardiff y le pedían explicaciones cuando le veían en la Feria en los días en los que el Sevilla se jugaba el pase a semifinales en San Petersburgo.
Y es que este piloto hispalense y con el corazón blanquirrojo se ha convertido en un auténtico talismán para el club de Eduardo Dato, porque desde que su aerolínea empezó a encargarse de los desplazamientos por el Viejo Continente con él a los mandos no han cesado los éxitos internacionales.