Quique Sánchez Flores es el elegido por la cúpula del Sevilla Fútbol Club para hacerse cargo de un equipo que no parece capaz de levantar cabeza. El madrileño tiene la complicada tarea de dirigir un vestuario roto, que en nada se parece al que tantas tardes de gloria regaló a los suyos.
Con muchos jugadores situados en la rampa de salida, el nuevo técnico sevillista se reencontrará con uno al que, precisamente, ya puso en el mismo sitio hace unos años. Joan Jordán, uno de los futbolistas más criticados por la afición blanquirroja, tuvo un desencuentro con el técnico en el año 2017.
En aquella temporada, Sánchez Flores dirigía al catalán en el Espanyol, y tardó poco tiempo en darle salida. Ese mismo verano, Jordán puso rumbo al Eibar, donde cuajó grandes actuaciones y fue fichado por Monchi para el nuevo Sevilla de Lopetegui en 2019.
Poco se sabe de la actual relación entre entrenador y futbolista, pero nadie cree que el mediocentro vaya a cumplir los 3 años que le restan de contrato en Nervión. La agresión que sufrió en 2022 durante el derbi de Copa del Rey truncó su futuro, y el Sevilla está pagando ahora las consecuencias.