El Sevilla no se quiere dormir en el futuro inmediato que va a definir sus ambiciosas metas. Para bien o para mal. Sin embargo, en el cómputo global de lo que llevamos de campaña, la frialdad de los números respalda, y mucho, el trabajo realizado hasta la fecha por el entrenador, Julen Lopetegui, cuyos planteamientos, de forma paradójica, han sido objeto de la reprimenda de la grada del Sánchez-Pizjuán en más de una ocasión. Salvo la poco justificable catástrofe de la Copa, el Sevilla prosigue con su camino en la Europa League, donde este mes le espera el cruce de octavos ante la Roma. En LaLiga, los guarismos firmados por el técnico vasco son de los mejores del club en el siglo XXI y por ende de su centenaria historia. Ello supone otro mérito añadido para el de Asteasu, que fue capaz de hacer carburar el proyecto desde los mismos inicios de la temporada en verano, con trece fichajes y un notable trabajo de adaptación en tiempo récord.
