El campeón de Italia, de nuevo, el subcampeón de Francia y el campeón de Croacia. El Sevilla afrontará un reto hermoso, en consonancia al nuevo proyecto que están terminando de perfilar los rectores del club, con el objetivo de alcanzar la más alta cota a la que jamás ha llegado en la Liga de Campeones, los cuartos de final del torneo. Después de la agridulce experiencia del curso pasado, en la que cayó en un grupo durísimo, del que salió airoso porque después le posibilitó conquistar su quinta Liga Europa, ahora arrostra una nueva aventura, con nuevos bríos, en el máximo torneo continental.