El Sevilla se enteró de que podía salir -el Villarreal se lanzó a por él tras la lesión de Soldado- y entabló conversaciones con el Real Madrid para intentar esa opción. La respuesta fue la misma que al equipo amarillo, Oporto o Valencia: Mariano no se mueve. Sin embargo, Monchi llevaba todo el verano con un as bajo la manga: Luis Alberto.
El conjunto sevillista había ofrecido 2,5 millones al Liverpool, que ha aguantado hasta el final del mercado para que en su subasta llegase una puja mayor. Deportivo y Valencia, también interesados, ofertaron una cantidad similar a los sevillistas. Pero en los últimos días llegó la Lazio y duplicó la oferta: 5 millones. Su destino, finalmente, ha sido Roma.
