El Sevilla selló matemáticamente el objetivo de la clasificación para la Champions League con la derrota del Villarreal en su estadio frente a la Real Sociedad por 1-2, lo que lo convierte ya en inalcanzable para el cuadro amarillo, que se queda a nueve puntos a falta de sólo dos jornadas para el final. Y los de Lopetegui pudieron celebrar el premio mucho antes de lo esperado, pues no contaban en el club que la plantilla que adiestra el técnico vasco pudiera certificar su billete para el máximo torneo continental con dos jornadas antes del final del campeonato, en las que, empatado a puntos con el Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone, su cometido será tratar de luchar por la tercera plaza de la Liga.