El Sevilla perdió ayer en El Sadar frente a Club Atlético Osasuna. El equipo de Joaquín Caparrós se quedó muy pronto con un futbolista menos, tras la expulsión de Lukebakio.
Después de todo, en el partido vimos como compitieron, tuvo ocasiones para poder empatar y llevarse un punto para Sevilla, que viendo lo apretada que está la zona de abajo, hubiera sido oro.
Joaquín Caparrós y los sevillistas, se quejaron bastante por la rigurosa expulsión de Dodi, que es trascendental para el Sevilla y que además se perdería la próxima final frente al Leganés.
Según avanzan en Orgullo de Nervión, el departamento jurídico de la entidad va a recurrir dicha cartulina. Entienden que el futbolista no tenía intención de golpear al rival, sólo quitárselo de encima. Creen que no se usa fuerza excesiva como indica el acta.
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En el Sevilla van a reclamar la expulsión, pero sin mucha fe, piensan que es muy difícil desvirtuar el acta de Cordero Vega:
«Golpear con el codo en la cabeza de un contrincante con uso de fuerza excesiva, cuando este último le había sujetado en la disputa de la posición, con el balón en juego y tras haber ejecutado el pase. El jugador recibió asistencia médica y pudo seguir disputando el partido».
