El Sevilla negocia desde su ventajosa posición. Lógicamente, pretende que se le compense económicamente por tener que convertir ese contrato en papel mojado. La suma va a superar los tres millones de euros que existían entre la compra y la recompra. Y aunque medios de la Ciudad Condal hablan de valores de la cantera como moneda de cambio (Adama, Halilovic…) el Sevilla lo ha descartado.