Rafa Mir es uno de los fichajes más desastrosos de la historia del Sevilla. Monchi decidió pagar una cantidad cercana a los quince millones de euros para traer a un futbolista que estaba despuntando en el Huesca.
En aquella época, Atlético de Madrid y Sevilla estaban peleando por un delantero que también había llamado mucho la atención en los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, con el paso del tiempo y la llegada de diferentes entrenadores, Rafa nunca se consolidaba como titular.
Después de varios meses sin jugar, el futbolista murciano firmó un contrato de cesión con el Valencia, con el que las cosas no le han ido bien, con problemas extradeportivos.
Una denuncia por un supuesto delito de agresión sexual y una serie de lesiones, han provocado que los chés no se planteen quedarse con él.
El Sevilla le ha transmitido que no se va a poner nunca más la camiseta del club, señalándole también todas las declaraciones desagradables contra el director deportivo y el club después de salir de la entidad.
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Según leemos en Estadio Deportivo, el atacante tiene varias alternativas encima de la mesa, con ofertas de equipos de Arabia Saudí y de Qatar, que están dispuestos a acoger al de Cartagena.
Es cierto que no querría salir de España, pero su circunstancias con la justicia, y la mala fama que se ha ganado, hace que sea prácticamente su única opción.
