El entrenador sevillista, Unai Emery, tiene en mente tanto a Gameiro como a Marin para el duelo de máxima rivalidad, que puede marcar tanto el futuro del equipo en la competición como el suyo propio en el banquillo. El Sevilla ganó oxígeno y tranquilidad para el parón en Cornellà, con el triunfo por 1-3 sobre el Espanyol; pero lo que ocurra en el Pizjuán frente al Betis será decisivo. Recuperar efectivos es, para Emery, el primer paso hacia la victoria.