El exsevillista, que asegura haber evolucionado mucho en su filosofía como técnico, disfruta del fútbol en Atenas, donde además de la Liga ahora luchará por conseguir el título de Copa, pero eso sí, Sevilla es Sevilla: «Creces o mueres, te metes en la onda o te queda atrás, pasa con todo en la vida. De esa filosofía viene mi mejora, mi evolución. Estoy orgulloso de mi paso por el Sevilla desde Tercera división hasta la Champions, con los torneos que hicimos y los magníficos momentos que he vivido. Hay mucha diferencia entre el Manolo Jiménez que se fue del Sevilla y el de ahora. Esté donde está siempre llevo a mi familia dentro, y a mi familia deportiva que es el Sevilla. Soy de Arahal, de Sevilla, y tarde o temprano voy a volver.