Hace ya tiempo que se impuso en nuestra sociedad la idea de la bipolaridad, de los extremos, de ser de izquierdas o de derechas, republicano o monárquico, del Madrid o del Barça, pro o anti lo que sea. Nada de medias tintas. Y a esto no es inmune el sevillismo. Hace mucho que echo en falta la moderación, los términos medios, mientras impera el “a mi lado o contra mi”.