En el Sevilla FC andan muy preocupados con la plaga de lesiones, fundamentalmente musculares, que asolan al equipo esta temporada. Si en la anterior campaña se alabó el buen trabajo de los servicios médico y físios del club, aun sin tener pretemporada, este año está siendo todo lo contrario.
En el club no encuentran explicación a tanta lesión muscular y andan con la mosca detrás de la oreja por el siguiente que podría caer.
Se trata de Diego Carlos, que lo juega todo sin apenas descanso, siendo el primer jugador en superar los 3.000 minutos esta temporada.
El brasileño ya ha dado muestras de cansancio cuando se tiró al suelo en los últimos instantes del partido contra el Dínamo.
El caso es que Julen no podrá darle descanso ya que apenas cuenta con efectivos en la zona defensiva, con Rekik lesionado y Koundé sancionado para el próximo choque de Liga.
