El Sevilla afronta un parón de selecciones, con una importante cantidad de futbolistas que no estarán disponibles para García Pimienta hasta la próxima semana, hasta 10 internacionales.
El primer partido después de esta ventana de combinados nacionales, será el derbi sevillano, el 30 de marzo a las 21:00 en el estadio Benito Villamarín. Al Sevilla se le da muy bien los derbis, pero es verdad que el Betis viene mejor.
Si alguien se la juega en este partido, es García Pimienta. La figura del entrenador está muy tocada después de la última derrota en casa frente al Athletic Club de Bilbao, y es que el Sevilla no consigue ganar en su feudo desde hace tres meses.
Al entrenador se le está agotando el crédito para algunos pesos pesados dentro del club, y es que ha tenido cinco oportunidades de sumar dos victorias seguidas, pero ha sido incapaz.
El juego da la sensación de que cada vez es peor, y encima no ha sabido dosificar las tarjetas, y dos de los centrocampistas titulares se pierden el derbi, Sow y Agoumé.
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Hay que valorar que con la plantilla que tiene, está al menos manteniendo al equipo fuera de la zona de peligro.
Aun así, en el momento en el que tiene que dar un paso adelante y aportar un plus desde el banquillo, da la sensación de que no tiene preparación para ello.
El partido del Villamarín puede suponer un antes o un después para su futuro.
