En la temporada 1955-56, en los octavos de final, el Espanyol se impuso por 3-2 en el encuentro de ida y se clasificó al empatar a cero el de vuelta, con unos marcadores muy parecidos a los de las dos siguientes veces que se vieron las caras (3-1 y 0-0, 3-1 y 3-3) para los barceloneses en la misma ronda de las campañas 1963-64 y 1971-72.