El Sevilla perdió en el día de ayer frente a Osasuna de Pamplona. El equipo tiene muy mala pinta y está solo a cinco puntos del descenso. Los sevillistas siguen muy preocupados con la situación y también enfadados.
La plantilla y varios de sus directivos, aterrizaron en la capital hispalense, donde decenas de aficionados estaban esperando que aterrizaran para lanzar un mensaje claro, esto ya no puede seguir así.
Algunos futbolistas fueron increpados, Joaquín Caparrós recibió el cariño de su afición pero el ambiente se caldeó bastante cuando apareció José María del Nido Carrasco, presidente y culpable de la situación actual del club.
En las imágenes se ve que está escoltado por algún miembro de seguridad privada, y que también tiene alrededor a varios canteranos. Uno de ellos era Hormigo, que fue titular frente a Osasuna.
El joven hizo un gesto al periodista para que dejara de grabar, pero algunos sevillistas no se lo han tomado bien, lo han entendido como una defensa del presidente y el jugador ha tenido que salir a dar su versión de los hechos.
Este ha sido el comunicado:
«Ante las imágenes del aeropuerto que salieron anoche quiero aclarar que:
En ningún momento quiero entrometerme en las quejas de los aficionados allí desplazados. Fue una acción rápida en la que pido al periodista que por favor no grabase más esa situación tensa pero totalmente comprensible.
Nadie más que yo y mi familia sabe lo que siento por este club y lo que significa para mí porque al igual que tengo la suerte de jugar también he sido aficionado desde pequeñito.
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Siempre he querido y quiero lo mejor para este escudo y esta afición, ya que los jugadores vamos y venimos pero ellos siempre están. Espero que se haya aclarado la situación y luchemos todos por el mismo objetivo».