Ante esta tesitura y la dificultad del rival alemán, la entidad de Eduardo Dato quiere que el Ramón Sánchez Pizjuán sea una caldera y dé el primer paso para ir con ventaja a tierras germanas para el choque de vuelta. De esta forma, los abonados que acudan al partido dispondrán de una seire de promociones de las que podrían beneficiarse.