Yevhen Konoplyanka protagoniza el mayor enigma en clave sevillista en este arranque de la temporada. El ucraniano firmó una notable pretemporada, en la que se le vio muy comprometido en el trabajo de equipo, desequilibrante y con pólvora. No en vano, alternó la banda con la delantera y fue el máximo goleador estival con tres goles. Estaba enchufado. Sin embargo, de repente ha desaparecido de los planes de Sampaoli.