El Sevilla FC ha dado una muy buena imagen en San Mamés frente al Athletic Club, consiguiendo llevarse un puntito muy valioso de Bilbao.
Evidentemente ha habido una mejora respecto a lo que vimos en Mendizorroza, por ejemplo.
El vestuario y el entrenador, han entendido la dificultad del momento que vive la entidad y han optado por la unión del vestuario y por el buen ambiente entre todos los trabajadores del club.
García Pimienta decía esto: «Llevamos dos meses y medio con el grupo. Supongo que cuando el club me renueva es porque valora este tipo de cosas. Sé que los jugadores están contentos y se creen esta forma de trabajar. Hoy se lo han dejado todo».
Lo cuenta José Manuel Rodríguez en Relevo y es que, según los propios trabajadores del club: «hacía tiempo que no se vivía este ambiente de trabajo».
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García Pimienta deja un lado una forma de trabajar en la que se buscaba siempre la autoridad y un líder, a que todos los jugadores sientan el proyecto como suyo y estén unidos ante las dificultades.
El grupo es sano y la relación entre todos es de ser una familia.
