En el descanso de ese partido, según la SER, Nzonzi tuvo una seria discusión con Berizzo y le mostró su disconformidad por jugar en el doble pivote junto a Pizarro. Tras anunciarle que no iba a jugar la segunda mitad, Nzonzi se duchó y se fue a su casa, sin quedarse a presenciar la segunda parte del choque.