Monchi y Lopetegui quieren tener bien atados todos los cabos y por eso, como máximos responsables técnicos de la primera plantilla, instauraron motu proprio, el protocolo de vuelta a la ciudad deportiva con todas las medidas de seguridad. Se anticipó el Sevilla así incluso a la UEFA, cuyo protocolo de control del Covid-19 no es vigente hasta las 48 horas antes de los partidos. Cualquier positivo antes de viajar a Duisburgo podría descartar al Sevilla de la lucha por la Europa League. Los futbolistas se sometieron a test para detectar posibles contagios. Fueron llegando de forma escalonada, con mascarilla, y fueron ejercitándose por turnos, individualmente, sin contacto entre ellos. En las imágenes no aparece Banega. El club, por estricto protocolo también, guarda un hermetismo absoluto sobre si el futbolista apareció ayer o no en la ciudad deportiva.