Reguilón dejó una de las imágenes más curiosas del fin de semana. Al final del partido se pudo observar al jugador abandonar el terreno de juego con una sonrisa en la boca… y un dónut en las manos. Al parecer un aficionado habría pedido al futbolista que le diese su camiseta, como suele pasar cada fin de semana en todos los estadios de fútbol. Lo inédito de esta ocasión es que el propio seguidor ofrecía al internacional una rosquilla a cambio de su equipación.