Pero ya han pasado ocho, y Perotti sigue de baja. Por el momento, su estado es una incógnita, pero si peca de algo no será de precipitación. Entre medio, durante este periodo de baja, el argentino ha estado a punto de marcharse a jugar a la Liga argentina, al Racing de Avellandea, marcha que se frustró en el último momento, ya que el conjunto sudamericano no aceptó las condiciones que puso el equipo nervionense.