Sandro Ramírez tiene prácticamente imposible hacer carrera en el Everton FC. Llegado en verano por expreso deseo de Ronald Koeman, el ariete canario pasó de jugar poco a no jugar nada con la salida del técnico holandés y la llegada de Sam Allardyce. La continuidad del veterano entrenador inglés le cierra por completo las puertas de su regreso a Liverpool.