En las negociaciones que mantuvieron el Sevilla y el Spartak de Moscú para el fichaje de Nico Pareja, los tiras y aflojas principales se centraban en la opción de compra que se iba a establecer en el contrato de cesión del jugador. Finalmente se fijó una opción de compra obligatoria de 2,5 millones de euros con un requisito para llevarla a cabo muy fácil de cumplir: conseguir la permanencia.