Una de las tareas más complicadas que tenía Víctor Orta en la planificación, era encontrar un sustituto adecuado para Youssef En-Nesyri, uno de los mejores delanteros de la historia del club, según los datos.
El delantero internacional con Marruecos, hacía una media de veinte goles por temporada, y con el poco dinero que tenía el Sevilla, era muy complicado encontrar un futbolista que te diera esos números.
Sin embargo, un sector importante de sevillismo se ilusionó con la Iheanacho. Es un futbolista muy conocido, porque fue importante en la primera época de Pep Guardiola en la Premier.
Sin embargo, su rendimiento está siendo muy malo. Los minutos que está teniendo en el césped, no los está aprovechando, ni un gol, ni una asistencia, además de una serie de remates que muestran una falta de calidad evidente.
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La ventaja que tiene el ariete, es que este Sevilla actual es bastante mediocre, y tiene mucha más opciones que seguir dándole oportunidades. Si este fuera un fichaje de otra época, como cuando estaban Bacca o Gameiro, acabaría en el banquillo y cedido a las primeras de cambio.
Sin embargo tendrá más oportunidades, a García Pimienta no le queda otra que ponerlo, ya que este Sevilla tiene la necesidad de esperar a jugadores que han supuesto una importante inversión, aunque no rindan desde primera hora.
