Oussama Idrissi se entrena estos días en la Ciudad Deportiva del Sevilla y viajará a Alicante con la esperanza de convencer a Julen Lopetegui de que puede tener un sitio en la plantilla nervionense de la próxima temporada. El Sevilla espera ofertas por el extremo pero en el club creen que Lopetegui debería darle al menos una ocasión de mostrarse durante estas primeras semanas de pretemporada.
Con Rony Lopes sí que existe el convencimiento de que no debe seguir. Ni su implicación pasada, ni las pocas facilidades que ofrece para salir, le dejan la puerta mínimamente abierta a quedarse en Sevilla. Con Rony sólo queda asumir la pérdida de dinero.
El Sevilla quiere ser más competitivo. Y Pozo ha crecido en el lateral en un contexto de mercado paralizado. ¿Tendrá este año la oportunidad que se le negó anteriormente? De momento, ha reducido sus vacaciones, y pese a estar en la burbuja hasta el 12 de junio con la absoluta, ya está a las órdenes de Lopetegui.
Otros jugadores como Amadou o Berrocal viven una situación distinta. Berrocal se ha afianzado en el Mirandés y le queda un año de contrato con la entidad nervionense. Debutó de la mano de Machín y su rendimiento ha ido en ascenso. Con Amadou podría concederle el club la carta de libertad en su último año de contrato.