Tras las renovaciones de Ocampos y Diego Carlos y ante un mercado muy parado, el Sevilla FC trabaja en ampliar contrato a dos jugadores claves en su columna vertebral. Se trata de Jordán y Bono. El catalán tiene contrato hasta 2023 y una cláusula de 60 millones, mientras en guardameta tiene un años más, hasta 2024, y una cláusula de 32 millones.
Segun apuntan en Orgullo de Nervión, Monchi espera que ambos jugadores firmen una mejora de contrato con su correpondiente subida de cláusula, para espantar a posibles compradores y tener más fuerza negociadora en caso de que alguno quiera salir.