Los términos de la operación son sorprendentes. El internacional croata ha firmado un contrato por cuatro temporadas, hasta 2024, cuando tendrá 36 años. Será su último gran contrato profesional en la élite, cobrando seguramente el sueldo más alto de la actual plantilla. Las condiciones de su contrato también están vinculadas a su rendimiento individual. Y el coste del traspaso, también es muy ventajoso para el Sevilla, que pagará al Barcelona un fijo de 1,5 millones y unas variables que podrían llegar hasta los 9 millones de euros. Esas variables llegarían a 6 millones si el Sevilla se clasifica para la Champions durante los cuatro años de contrato. Al Sevilla le interesa pagar los 10,5 millones que están estipulados como tope: significaría que ha alcanzado cotas inéditas en toda su historia (Campeón de Liga y Champions).