Optimista, confiado, transmitiendo buen humor y seguridad en sí mismo. Los elementos y las circunstancias adversas no aminoran la personalidad pujante de Vincenzo Montella, que prevé una dura batalla en La Rosaleda ante un Málaga que es colista, sí, pero que, según su entender, «aún cree en la remontada» y eso lo hace muy peligroso. Llega, además, al estadio de la avenida de Martiricos un rival muy especial como es el Sevilla y la grada local querrá festejar como se merece el día de Andalucía… La lluvia se anuncia como otro elemento contra el que luchar, pero ahí también tendrá que sacar carácter el Sevilla. «No será un problema, salvo para mí, porque me mojaré», dijo socarrón un Montella que no teme tampoco la escalada del Betis.