Decía que no es lo mismo que te piten un penalty en el último minuto, cuando ya no hay tiempo de reacción, a que te dejen con diez a falta de media hora, ya que, en este último caso, un equipo fuerte con un buen entrenador debe tener los recursos necesarios para mantener el tipo de una manera mejor a como lo hizo el Sevilla en aquel partido. Creo que hay que levantar la voz contra los mangazos (cosa que no se viene haciendo, por cierto), pero también, a la vez, analizar los errores propios. Más que nada por nuestro bien.