Según ha podido saber ABC de Sevilla, el escenario que maneja el Sevilla FC de forma conjunta con LaLiga y el CSD es que cuando se inicie LaLiga, puedan acudir al Sánchez-Pizjuán un 30% de los aficionados, unos 15.000 espectadores aproximadamente. Más adelante, ya en el mes de noviembre, y si todo sigue su curso normal en el que no existieran muchos rebrotes, se ampliaría el aforo al 50% de los asientos, o lo que es lo mismo, a unos 22.000 espectadores. Y en el mejor de los casos, en enero de 2021 contemplan desde el club nervionense que pudiera haber un acceso sin restricciones. Todo el control de acceso al estadio se haría a través de entradas, por lo que se descarta que haya carnet para los accesos. Los socios que no hayan solicitado la devolución del dinero al club tendrán prioridad a la hora de sacar las entradas, que en la medida de los posible se buscará que sean mediante un código QR en el propio móvil. La idea es que haya una rotación para que todos los sevillistas puedan acudir al campo en varios partidos mientras siga habiendo restricciones. En cuanto a los partidos europeos, la próxima campaña no habrá Abono Total, ya que las competiciones comenzarán a disputarse con limitaciones de aforo.