Esa genial película del cineasta norteamericano Harold Ramis, en el que el protagonista Bill Murray intentaba luchar contra la constante repetición del mismo día (El día de la marmota) una y otra vez, podría aplicarse al caso de Hedwiges Maduro. El centrocampista holandés militó en el rival sevillista de este sábado, el Valencia, durante cuatro temporadas y media y nunca se sintió protagonista a las órdenes de Unai Emery. Tras un comienzo prometedor en el Sevilla, cuajando grandes partidos como ante el Real Madrid, el holandés ha perdido protagonismo por culpa de una lesión y merced al buen rendimiento de Kondogbia, que le ha arrebatado el puesto junto a Medel y ha propiciado que el espigado jugador holandés tema regresar a vivir lo mismo que viviera en la capital del Turia. Teme volver a caer atrapado en el tiempo.