Algo debe estar barruntando Míchel en torno al futuro de algunos de sus jugadores. El técnico espera que no le toquen la plantilla en el mercado de enero. «Creo en los Reyes Magos. Ya he redactado la carta. No pido mucho. Solo que no me quiten jugadores», ha afirmado. La situación económica manda. Del Nido ya adelantó en la pasada junta que era necesario vender jugadores por valor de 16 millones de euros.