La llegada de Joaquín Caparrós al banquillo sevillista también ha afectado al danés Simon Kjaer, quien ha pasado de ser el eje de la zaga de Pablo Machín a haberse caído de las dos primeras convocatorias del utrerano. Hoy por hoy, no entra en los planes de Caparrós y en Italia ya hablan de un interés del Milan, que desea reconstruir su defensa. Según Calciomercato, lo tasan en diez millones de euros y gustarían meterlo en la operación por André Silva.