En una larga entrevista en SFC TV, el director deportivo repasaba la situación del equipo tras la eliminación copera:
«Me cuesta trabajo hablar de este grupo, ser objetivo y no emocionarme. Este grupo merece mucho la pena. Me quedo con el grupo en la cena. Hablamos con ellos e intenté levantarles la moral. Y no pude. Estaban tocados y dolidos. Desilusionados. Sabían lo que podíamos traer de nuevo a Sevilla, a lo que podíamos aspirar. Ya hoy por la mañana, en el viaje, era distinto. Están intentando levantarse más fuertes si cabe porque nos quedan retos muy importantes. El cuarto puesto en Liga es fundamental para nuestro crecimiento. Y nos queda una noche en Dortmund, con todo en contra, pero con una posibilidad de revancha. La vida te da oportunidades».
«Ojalá todas las exigencias sean esas, enfadarnos por no llegar a una final. Esa es nuestra grandeza y crecimiento. Te das cuenta que los clubes nos respetan como a los grandes. Y las aficiones rivales celebran nuestras derrotas. Empiezan a tenernos en cuenta. Equipos como el Barcelona, con jugadores como Piqué o Messi, son jugadores que llevan toda la vida tratando de ganar todos los partidos. Y nosotros estamos cercanos a eso».