“Es evidente que es un trabajo que me queda. Faltan 40 y tantos días de mercado. La gestión de una dirección deportiva no sólo es comprar, sino también vender lo mejor posible. Los jugadores con los que no contamos son un patrimonio que tiene el club e intentaremos rentabilizarlo lo máximo posible y no haremos ninguna locura presionado por nada y ni por nadie”, confesaba Monchi. Al ser cuestionado por si es momento para pausar en la planificación y ver diferentes opciones, Monchi tiene claro que hay que seguir trabajando. “Pararse no. No hay en la planificación en verano momentos para pararse, sino para seguir construyendo la idea que tenemos en mente. Hemos avanzado porque son diez jugadores. El ritmo y las ganas no se frenan. Queremos continuar construyendo el edificio que queremos tener de cara al comienzo de la temporada. No hay compás de espera ni ralentización, sino todo lo contrario”.