El goleador sevillista no estuvo este lunes especialmente afortunado durante el encuentro ante el Deportivo, hasta que marcó el gol. De hecho desperdició incluso una gran oportunidad. Eso sí, no desaprovechó el pase de Cicinho desde la derecha para hacer su tercer gol en cinco partidos. Un buen inicio de temporada para el internacional sevillista.
Por cierto que el equipo hispalense lleva, entre Liga y Copa, desde 2007, tres victorias y tres empates en el estadio gallego. Antes se había llevado 54 años sin ganar allí.