Todos deben aparcar las dudas. Está en juego nada menos que una final, otra final más de las muchas que lleva disputadas en esta centuria el Sevilla, dieciséis en total, que se dice pronto entre UEFA Europa League, Copa del Rey y Supercopas. Y tanto el club, como el cuerpo técnico y la afición deben responder con un Fuenteovejuna que tiene prolijos y fructíferos precedentes. La quinta goleada encajada de este curso de emociones tan dispares ya está olvidada, o debería estarlo, por todos los protagonistas. Y en esta ocasión los aficionados que colmarán de pasión el Ramón Sánchez-Pizjuán también son protagonistas principales, casi tanto como los jugadores.