Cuando García Pimienta se quejó de que la plantilla que le iba a quedar para el segundo tramo de la temporada era corta, lo hacía con conocimiento de causa.
A los 20 jugadores del primer equipo que iba a tener a su disposición, había que quitar a Nianzou, que ya se sabía que no iba a estar disponible el resto del curso futbolístico.
Al francés, habría que ir sumando los distintos lesionados que podían ir surgiendo, como han sido los casos de Lokonga y Adams.
Pero además, hay que añadirle que en este tramo de campeonato, los sancionados van a ser la tónica general de cada jornada.
Así, si para este domingo no tendrá disponible por este motivo a Badé y Saúl, para el siguiente encuentro ante el Mallorca, otros tres futbolistas estarán apercibidos.
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Así, si Djibril Sow, Agoumé y Gudelj, este último si se termina recuperando de sus molestias, ven una cartilina amarilla, se perderían la siguiente jornada.
Es por ello, que García Pimienta esté metiendo en la dinámica del primer equipo a cada vez más jugadores del filial, como Pablo Rivera o Manuel Di Massimo.
