Nueva derrota del Sevilla en esta ocasión en tierra navarras frente a Osasuna de Pamplona. Lo cierto es que el partido estuvo condicionado por la expulsión Lukebakio, pero también es verdad que el equipo de Joaquín Caparrós ya iba perdiendo cuando se produjo esa acción.
Hay mucho miedo en el sevillismo porque los puestos de descenso están a solo cinco puntos, quedan cinco jornadas y el próximo partido frente al Leganés será una auténtica final.
Vimos unas imágenes muy llamativas a la llegada del equipo al aeropuerto de Sevilla, y es que todos los futbolistas fueron abucheados e increpados, pero sobre todo José María del Nido Carrasco, presidente de la entidad.
No estaba en la expedición, el director deportivo, Víctor Orta, un hombre que no goza precisamente de mucha popularidad entre el sevillismo, hasta gente muy afín al club ya lo cuestiona.
Como ejemplo, esto dijo Pablo Blanco en los micrófonos de Movistar antes del choque, dejando un dardo en relación al delantero y a la falta de jugadores competitivos:
«Para volver a ilusionar a la gente, lo primer pasa por sacar esta temporada de manera tranquila, por estar tranquilos los partidos que nos quedan».
Falta de gol: «Los goles son lo más difícil en el fútbol. El que suele tener un buen goleador intenta retenerlo, así que firmar a un goleador ahora es más complicado, pero bueno, nosotros tenemos que marcar, ganar y empezar a estar tranquilos».
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No hay energía: «Nosotros siempre hemos sido un equipo competitivo, difícil de ganar, tenemos que volver a la senda de ser un equipo trabajado, con energía, que a los contrarios les cueste ganarnos los partidos, que les sea difícil».
