Así, tal y como ha podido conocer ESTADIO Deportivo por fuentes próximas a la negociación, es el expreso deseo de Unai Emery lo único que hace demorar la firma de un acuerdo para el que, incluso, estarían perfiladas ya las cláusulas que arbitrarían su hipotético adiós ante la llegada de un equipo más poderoso económicamente hablando o que le abrirían la puerta de salida por cuestiones meramente deportivas.