Nueva prueba de fuego para un Sevilla de la contemporaneidad acostumbrado a estar presente en ellas. La entidad radicada en el sevillanísimo barrio de Nervión se enfrenta de nuevo a unas semifinales de la Copa del Rey, las octavas durante el presente siglo, y en esta ocasión el rival será el Leganés, un modesto club del cinturón de Madrid que se ha ganado con todo merecimiento el derecho a estar metido entre los cuatro únicos equipos que aún optan a ganar este título.
