El técnico sevillista echó el balón al suelo para hablar de la buena racha del Sevilla y de los tantos jugadores que ha recuperado con una enfermería prácticamente vacía en comparación de hace meses.
Quique se mostró tajante con no confiarse pese a los buenos resultados: «Confiarse en alta competición es un gran error. Aquí lo que hay que hacer es un trabajo duro, dinámico, austero y estricto».
«Hay que saber qué es competir, ideas, ambición y creo que estamos en el camino».
Sobre los lesiones, siguió la misma línea de bajar el azúcar, como diría Caparros, generado esta semana: «Los que han estado lesionados graves no estarán al cien por cien para mañana, son lesiones largas, pero muchos entrarán en la convocatoria».
«Habrá varios nombres que se van a incorporar a la lista de este partido y eso es fantástico».
Sobre su futuro en la entidad hispalense, el técnico madrileño quiso apartar ese foco: «No me hagáis estas preguntas al final porque yo no pestañeo. Estoy en mi despacho, llego al hotel y vuelvo a no pestañear».
«Estoy enfocado en el trabajo. El contrato está en un cajón, en el mismo desde el día que lo firmé».
No obstante, hay que recordar que en su contrato ha quedado pactado que en caso de que quede entro los diez primeros clasificados esta temporada en LaLiga, automáticamente sería el entrenador del Sevilla para la siguiente campaña 24/25.