Rakitic también tiene sus intereses”. La frase que dejó José Castro en su primera entrevista (a este diario) como presidente del Sevilla resultó una declaración de intenciones. La hoja de ruta en el asunto del croata está cantada. Su nueva cláusula, sobre 25 millones, será su precio de mercado. El club podrá decir que sólo se marchó porque rescindió unilateralmente el contrato y el jugador hablará, vaya donde vaya, de oportunidad única. Entre otras cosas, porque será así. A pocos se les ha visto más adaptado al club que a Rakitic, que el domingo estuvo fabuloso en el Plus cuando le preguntaron por el Atlético: “A mí me gusta jugar en el Sevilla. Hoy y siempre”.