Ha terminado la Junta del Sevilla. Ha sido agria en algunos puntos, pero Castro no ha tenido el menor bache. En realidad ha sido un todos contra Blázquez que ha terminado con la aprobación de la modificación del artículo que exige la mayoría reforzada para las decisiones importantes, y que no baste con la simple, y con el propio Blázquez fuera del consejo. El ya exconsejero ha sacado algún trapo sucio al final, pero no ha logrado frenar el ambiente muy en contra que tenía desde el primer minuto. Los americanos siguen con su capital, del 7,5%, y seguirán siendo considerados como los enemigos públicos, pero pierden fuerza, bastante fuerza de cara al futuro. El socio de Del Nido ya no es tan determinante en la toma de decisiones. Castro ha terminado con un encendido discurso en el que ha resaltado que la sexta Europa League «está ahí y es mérito de todos».
