Son muchos los retos y objetivos que el Sevilla se marca con la llegada del entrenador soriano, pero a grandes rasgos, y como elemento diferenciador de la recién acabada campaña, uno destaca por encima de todos: recuperar el terreno perdido con el gran rival directo de los nervionenses, el Valencia. El conjunto che, de la mano de un ex del Sevilla como Marcelino García, se ha aprovechado de la irregular temporada sevillista y su exitoso devenir en la Champions y en la Copa del Rey para birlarle la cuarta plaza en la Liga y, por lo tanto, el estatus de equipo de Champions League. En el Sevilla son conscientes de que no puede permitirse que sus grandes rivales, Atlético y Valencia, pese a las grandes diferencias en poderío económico con el conjunto madrileño, se distancien aún más dentro de un año, por lo que regresar a la Champions será el objetivo número uno de la entidad de Nervión.